martes, 28 de enero de 2014

Pete Seeger. La canción como militancia

Pete Seeger. La canción como militancia







"...Sabes que está más oscuro antes de amanecer.
Esta idea me mantiene en movimiento.
Si pudiéramos hacer caso a esas advertencias,
el momento es ahora,  bien temprano por la mañana...

Y por eso continuamos mientras vivimos,
hasta que no tengamos nada,  nada más que dar.
Y cuando estos dedos no puedan ya tocar,
pasaré la vieja guitarra a otros dedos más jóvenes..."



Con Pete Seeger desaparece una cierta manera de entender la música popular. Dejando su ejemplo como herencia que alguien recogerá, con su fallecimiento muere también toda una etapa de la canción popular entendida como militancia. Y con esta palabra no quiero referirme sólo a la conciencia política ni a la lucha por construir un mundo mejor que caracterizaron su vida y que caracterizan (y caracterizarán, espero que aún por muchos años) su obra, sino a una militancia en la propia canción como forma de expresión y de comunicación. Para él, más importante que el cantante era la canción, y más que la canción, la gente. Por eso, sin duda, la parte más importante de su carrera, la que, al menos a él más le importaba, era la de hacerles cantar. No escuchar, cantar ellos mismos. En el recital y fuera de él.

Para Pete Seeger, las canciones formaban parte indisoluble de la identidad de los pueblos y las personas que los integran. Las canciones han acompañado al ser humano desde los albores de su existencia. Le han servido para expresar el amor y la tristeza, para celebrar los nacimientos y condenar las guerras, para llorar en soledad y para bailar las fiestas, dormir a los niños, recoger la cosecha, reivindicar salarios, brindar en las borracheras, rezar en las iglesias, avanzar en las manifestaciones, fabular milagros, narrar aventuras con finales felices o terribles, reír, soñar, cortejar, despedir a los muertos queridos.

Y para todo ello no son necesarias radios, ni discos, ni siquiera youtube. Tan solo una guitarra, o una ocarina, o un timple. O la sola voz. Porque las canciones de verdad, las que nos conmueven, nos alegran el día o nos cargan de mala leche están en nosotros mismos, en cada una de las personas que alguna vez nos hemos emocionado escuchando una canción que nos ha retratado a nosotros mismos. A partir de ese momento la canción es nuestra, y sólo hay que cantarla para resucitar los sentimientos que produjo en la primera audición.

Recordemos que quienes hoy todavía cantamos “No nos moverán” en concentraciones que aún suelen acabar con demasiada frecuencia en carreras, se lo debemos a Pete Seeger. Todos hemos aprendido la canción de alguien que se la había escuchado a otro que la había recibido de uno que la había aprendido de Seeger, a quien a su vez se la habían enseñado los sindicalistas que la habían adaptado de un viejo himno negro de liberación. Si Pete Seeger ha conseguido esto, o ha contribuido a ello, sin duda se va como un triunfador. No hay otro éxito comparable.

Personalmente creo que está es la enseñanza más importante que yo he sacado de años y años de escuchar sus canciones y leer sobre él. En estos tiempos en que la canción es, más que nunca, una especie industrial en vías de extinción, considero que no es una mala lección, de la que pienso que deben tomar nota los nuevos músicos populares y cantautores. Es bueno cantar sobre un escenario las canciones propias o ajenas. Pero lo sustancial sigue siendo que los de abajo, los sin foco, hagan suyas las canciones y las canten cuando las necesiten. Para eso existe la canción.


"...Soy un tipo corriente,  he trabajado toda la vida.
Alguna vez me asentaré con mis hijos y mi esposa.
Me gusta ver una película, tomar un  trago,
y me gusta ser libre para decir lo que pienso.
Debe ser cosa de la familia...
mi abuelo cruzó el océano por esa misma razón...

Nunca he sido de los que se quedan atrás
y dejan que los demás hagan todo el trabajo,
así que cuando llegue el momento, estaré dispuesto.
Y puedo hacer buen uso de mis dos manos.
Dejaré de tocar este banjo con los muchachos,
y lo cambiaré por algo que haga más ruido..."


domingo, 26 de enero de 2014

GERRY ADAMS. Entrevista. 1994

Gerry Adams. Entrevista. 1994




El ambiente que no falte


En 1994 tuve la oportunidad de entrevistar a Gerry Adams para El Periódico de Catalunya. Aunque se trate de una entrevista coyuntural, centrada en la situación política de Irlanda del Norte en aquellos momentos, pienso que es pertinente reproducirla aquí y ahora. Especialmente por cuanto puede servir para reflexionar sobre las maneras y los métodos de llevar adelante un proceso para la finalización del terrorismo.

También para expresar mi estupor por el hecho de que Arnaldo Otegui continúe aún en prisión.

Gerry Adams había sido encarcelado en 1972 (siendo liberado para participar en uno de los muchos intentos de negociación entre el IRA y el gobierno británico), tras cuyo fracaso volvió en 1973 a presidio, en el que permaneció hasta 1977, siendo detenido de nuevo en 1978. Nada más ser puesto en libertad ese mismo año fue elegido Vicepresidente del Sinn Féin, partido legal pese a ser considerado el brazo político del IRA, del que Adams sería elegido en 1983 Secretario General, cargo desde el que promovió la renuncia del IRA al terrorismo y la actuación política institucional.

Para la fecha de la entrevista, mayo de 1994, estaban recientes los acuerdos entre los gobiernos británico e irlandés que habrían de conducir al alto el fuego proclamado por el IRA apenas un par de meses después. Se iniciaba así un largo proceso de negociaciones que no alcanzaría su meta, tras numerosos avances y retrocesos, hasta las elecciones de 2007.




El presidente del Sinn Fein es posiblemente el personaje bisagra sobre el que puede girar la paz en el Ulster. Tras el acuerdo anunciado en otoño por los gobiernos de Londres y Dublín, Gerry Adams, presidente de aquel movimiento irlandés, ha insistido durante su estancia en Madrid en exigir nuevas explicaciones sobre el documento antes de pronunciarse definitivamente sobre el mismo.

-¿En qué estado se encuentra la oferta de negociación realizada por Londres y Dublín el otoño pasado?

-El tema sigue, no acabará hasta que no haya un acuerdo de paz. El acuerdo entre Londres y Dublín no es un acuerdo, es un paso hacia un acuerdo. Así que queda un camino por recorrer, el conseguir la paz tiene que ser visto como un proceso.

-Pero parece ser que no se ha avanzado mucho. ¿Qué clarificaciones pide el Sinn Fein?

-La declaración es un documento ambiguo, así que queremos aclaraciones acerca de algunas partes del texto. Ambos gobiernos han hecho interpretaciones contradictorias acerca del documento. Hemos pedido clarificaciones de Dublín y las ha dado, y estamos procurando que Londres nos de algunas clarificaciones similares. Finalmente, como la declaración sólo es un paso, a pesar de que podía ser significativo, tenemos que saber cuáles serán los próximos pasos. Lo que estamos buscamos es saber qué pretende Gran Bretaña a largo plazo.

-¿Hay una salida política al problema del Ulster?

-Hacer la paz requiere un diálogo sin condiciones, requiere el compromiso por todas las partes para buscar una solución, requiere un proceso completo. Los principios democráticos que dominarían un acuerdo deberían basarse en el hecho de que los irlandeses puedan acceder a la autodeterminación. El Gobierno británico afirma que no tiene ningún interés en Irlanda. Eso está bien. Añera hay que intentar elaborar una base para establecer una Irlanda estable. Vamos a ver si es sincera esa posición y de acuerdo con ella las gentes de toda Irlanda pueden tener la capacidad de gobernarse a sí mismas. La manera en que decidamos hacerlo es asunto nuestro, ÍTQ de los británicos. El Sinn Fein insistiría en que el acuerdo tiene que ser capaz de conseguir la alianza de todas las organizaciones. Queremos una democracia que funcione, que refleje la diversidad del pueblo irlandés. Éstos son los principios amplios de Un acuerdo.

-¿Cómo se combinan en el panorama político irlandés los elementos religiosos, nacionales y de clase?

-El elemento religioso es una dispersión de la realidad. Necesitamos una situación en la cual la religión pueda ser un asunto de conciencia personal y que haya una garantía de libertades civiles y religiosas, y eso es lo que pasaría en una Irlanda nueva, porque la división no es religiosa, es política. Una parte de nuestra gente, los unionistas, tienen una relación con los británicos porque creen que eso defiende su posición. Es una minoría, pero significativa.

-¿Y la mayoría?

-La gran mayoría de la gente se relaciona mucho más con el pueblo de Irlanda, así que tenemos que remover las causas de la división política. El elemento sectario religioso fue planteado y es utilizado por los británicos para causar la división, así que tenemos que construir una sociedad que lo supere. No tengo ninguna duda de que si los británicos cambiaran su posición y la gran mayoría de los irlandeses estuviera a favor de eso, los unionistas variarían también su posición, porque son víctimas de la historia. Son como los blancos en Suráfrica, si Mándela y De Klerk hubieran esperado a que la derecha se pusiera de acuerdo nunca habrían progresado, así que el Gobierno británico tiene la responsabilidad de llevar la situación hacía adelante y los republicanos irlandeses tienen la responsabilidad de buscar un acuerdo nuevo y trabajar por la unión.
-¿Recibió algún tipo de apoyo en su reciente visita a Estados Unidos?

-Sí, el hecho de haber sido invitado a EEUU y que me dieran visado tras 20 años de no hacerlo indica que hay un apoyo. La visita fue muy positiva y había signos muy optimistas. Pienso que también es importante que los ciudadanos de EEUU hayan podido recibir información directa, que es su derecho.

-¿Variaría el proceso de paz en el Ulster si los laboristas llegaran a Downing Street?
-En los próximos dos años no habrá elecciones en Gran Bretaña, así que la paz no debería esperar tanto tiempo, pero de todas formas si fuera elegido un Gobierno laborista permitiría un desarrollo muy interesante, porque' teóricamente su posición está a favor de la unidad irlandesa y tenemos un Gobierno irlandés que está preparado para aplicar esta política. El Sinn Fein quisiera apoyarla.

-¿Qué tipo de relación existe entre el Sinn Fein y el IRA?

-El IRA es una organización distinta, El Sinn Fein es un partido político abierto, comprometido con la lucha política. Estamos organizados en conferencias públicas, con líderes públicos. El IRA es una organización armada, aceptada, naturalmente, en el contexto de la ocupación militar. Nosotros aceptamos que los ciudadanos tienen el derecho a la resistencia armada, pero eso es una cuestión táctica. Eso es asunto de los ciudadanos y durante siete años el Sinn Fein ha desarrollado una estrategia que procura buscar un fin a los conflictos armados para que haya una desmilitarización. Lo que el Sinn Fein quisiera ver es un fin del IRA y de la lucha armada y que salieran el Ejército británico y los escuadrones de la muerte de los unionistas. Ésa es nuestra mayor reivindicación.

-Tras esta visita a Euskadi y Madrid ¿cree que hay alguna relación entre la situación del País Vasco y la del Ulster?

-La visita fue demasiado corta y tenía que trabajar demasiado. En cualquier caso, es difícil y erróneo indicar paralelismos entre luchas diferentes, con condiciones diferentes, problemas diferentes y tácticas diferentes. Pero seguramente hay similitud en los fines.







miércoles, 15 de enero de 2014

A propósito del derecho de las mujeres a decidir sobre su maternidad

A propósito del derecho de las mujeres a decidir sobre su maternidad





Hasta Trento, la santa iglesia católica dudó de que las mujeres tuvieran alma. Hoy, 450 años después, parece ser que lo que dudan es que tengan entendimiento. Y sensibilidad.

Esta afirmación tan rotunda podría ser sólo una boutade para captar la atención del lector, pero por desgracia no es así. Al menos si nos atenemos a la ideología que subyace en el proyecto de contrarreforma de la ley del aborto presentado por el Gobierno, brazo político y legislativo de la Conferencia Episcopal en este caso, como lo es en otros de la oligarquía financiera. ¿Qué otra cosa revelan las condiciones que se quieren imponer?, los dos médicos que deben autorizar, el asistente que social que ha de hacer recapacitar, los ridículos e insultantes siete días de obligada meditación.

No es sólo que se limiten o cercenen derechos de las mujeres que deseen abortar, es que lo que se está poniendo en cuestión es la propia capacidad para decidir en tema tan importante y personal. Como ellas no tienen las luces necesarias para tomar decisiones sobre su maternidad, aquí estamos nosotros para decidir por ellas, viene a decirnos, quizás entre líneas, pero de manera rotunda. Parecería que piensan que las mujeres, inconscientes y casquivanas como son, salieran dispuestas un fin de semana sí y otro también a quedarse embarazadas para poder abortar dos meses después y pasárselo pipa. ¿Pero quienes se han creído que son? Dios y sus creencias les prestan la luz que ilumina los caminos de sus vidas, y no seré yo quien les niegue el derecho a caminar siguiéndola. Pero que no intenten que sus personales linternas nos desorienten a los demás en nuestro propio camino, ni quieran deslumbrarnos con ellas para alejarnos de nuestra propia moral y principios.

Por años y por vida conozco a unas cuantas mujeres que han abortado, en el lejano Londres o en clínicas más cercanas y seguras que la clandestinidad, que también he conocido, y no sé de ninguna que lo haya hecho a la ligera o de manera frívola, por capricho o, mucho menos, por maldad. Tampoco he sentido que les produjera, creo que hay que decirlo, esos horribles traumas psíquicos que auguran los voceros del infierno. Afirmar o sugerir otra cosa es una infamia, y legislar como si así fuera nos retrotrae al pozo más lóbrego del pensamiento humano. El que negaba el alma a las mujeres. El que ahora quiere negarles el derecho a decidir y la capacidad para ejercerlo.

Acostumbrados a la estrategia del policía bueno y el policía malo, el gobierno parece haber comenzado el juego de dar y quitar, de amenazar y regalar cigarrillos. No resultaría extraño que al hilo de sus particulares intereses electorales al final de la tramitación nos encontraron que han ampliado alguno de los supuestos del aborto que ahora se prohíben, como en el caso de la malformación del feto, excesivo hasta para sus propias filas. No conviene engañarse. Aunque así fuera, el fondo despreciativo, injusto y discriminatorio de la contrarreforma seguiría siendo su fundamento ideológico. Y es con eso, precisamente, con lo que hay que acabar. El derecho a decidir es la madre del cordero si no queremos que el espíritu de Trento dirija nuestras vidas.



Resulta penoso tener que cerrar con esta canción de Luis Pastor
que escribimos hace 30 años, en 1984.
Es como un permanente volver a empezar una pelea que se creía superada
pero que no termina nunca.
No pretendimos lanzar una proclama,
sólo contar una historia ante la que pensar.
Me gustaría que en esta “Cristina” hubiera quedado reflejado
algo de lo aquí escrito.








domingo, 12 de enero de 2014

Hacer un pan como unas hostias. El PP, el País Vasco y la manifestación de Bilbao.

Hacer un pan como unas hostias
El PP, el País Vasco y la manifestación de Bilbao







La manifestación de ayer en Bilbao es la demostración patente de que al PP le está saliendo por la culata cada tiro (metafórico, claro) que tira últimamente en el País Vasco. Obsesionados por contentar a la fracción más guerracivilista de su electorado, que no concibe el fin de una guerra sin la venganza del vencedor y la humillación del vencido, han conseguido hacer confluir en una acción común prácticamente sin precedentes al independentismo de derechas y al de izquierdas, a más de otras fuerzas aledañas. Una unión significativa que jugará sin duda un papel determinante en el futuro inmediato de Euskadi, cuando a no mucho tardar se ponga sobre el tapete, esta vez sin terrorismo, el tema decisivo del derecho de autodeterminación y la independencia.

Parecería que los populares y su gobierno no han extraído ninguna enseñanza de las consecuencias que han acarreado para Catalunya las limitaciones impuestas por el Tribunal Constitucional en 2010 al Estatuto previamente aprobado por el Parlament y decidido en referéndum por los catalanes; limitaciones que abrieron de par en par las puertas a las reivindicaciones independentistas actuales. En consonancia para esa incapacidad de aprender de la experiencia, la lista de errores políticos del gobierno en esta etapa del fin del terrorismo en Euzkadi resulta de una evidencia insultante para todos los españoles, no sólo los vascos.

Se opusieron de manera frontal a la celebración de la reunión de ex presos en la que, precisamente, iban a escenificar su acatamiento de las leyes penitenciarias del Estado, lo que no es paso pequeño en el proceso de fin de la violencia y derrota del terrorismo que estamos al fin estamos viviendo. No sólo no les sirvió de nada, pues la reunión se celebró de todas maneras, sino que con ello se forzó que pudieran contar con la aquiescencia judicial a su acción, que acabó demostrando, además, de cara a todos, que no estaba entre los objetivos de los ex presos ninguna exaltación del terrorismo, sino que su reunión constituyó todo lo contrario: una llamada para su finalización. Por si fuera poco, la jugada les costó la reprimenda del juez, obligado a explicar en twiter el significado de la ley que el gobierno debería conocer mejor que nadie y que habían preferido ignorar. Echar leña al fuego es como se denomina a este tipo de cosas.

Considerando tal vez que aún no habían avivado suficientemente la candela, forzaron de nuevo la máquina judicial para la prohibición de la manifestación de ayer, que sin su intervención hubiera sido una más de las muchas acciones realizadas hasta ahora en exclusiva por el independentismo de izquierdas a favor de los presos y su acercamiento a Euzkadi, reivindicación que, por otra parte, no parece sea descabellada en este momento del proceso. A la vista de los resultados resulta patético lo conseguido. No sólo ha tenido lugar la manifestación sin asomo de violencia, sino que a ella ha acudido una cantidad insólita de ciudadanos y la convocatoria ha contado con la firma conjunta de PNV y Bildu, con la participación de otras fuerzas políticas y sindicales, tanto participes de la reivindicación independentista como simplemente partidarias del derecho de los pueblos a elegir la forma de pertenencia o no a un Estado.

Por si fuera poco, en medio de tal cúmulo de errores se ha producido la controvertida detención de los abogados que, si hemos de creer los motivos del Gobierno, transmitían las ordenes de ETA a sus presos; es decir, de los encargados de tramitar la aceptación de los encarcelados de las leyes penitenciarias actuales. Una operación que, en el colmo del dislate, llegó acompañada del estrambote ridículo de vender la piel del oso cuándo aún no lo habían cazado.

A no ser que el único objetivo político del Partido Popular sea el electoralista, para el que no se pueden permitir prescindir ni de uno solo de sus votos, y no les preocupen en absoluto las consecuencias de sus actos fuera de ese tacticismo oportunista, esto es lo que mi madre llamaría hacer un pan como unas hostias.

Si le hubiera cortado las alas

habría sido mío,
no habria escapado.



Pero así,
habría dejado de ser pájaro.



Y yo...
yo lo que amaba era un pájaro.



martes, 7 de enero de 2014

LECTURAS. Gabriela Mistral

LECTURAS. “Tala” (Gabriela Mistral).
Mi primer libro de poemas.






Hay libros seminales instantáneos, que desde la primera vez que se leen plantan en el cerebro una semilla que va creciendo y multiplicándose. También son a veces como cajas fuertes de apertura retardada, que tardan en dejarse robar los secretos que guarda su interior.

Debía tener yo, no lo recuerdo con exactitud, alrededor de 12 o 13 años, era mi cumpleaños y una prima de más edad, tanta más que ya estaba casada, me regaló un libro. “Ahora probablemente no lo entenderás, pero seguro que te gustará dentro de un tiempo”, vino a decirme, y dejó en mis manos un ejemplar titulado “Tala”, de una poeta de la que no había oído hablar pero que desde aquel día me acompañaría toda mi vida: Gabriela MistralEra mi primer libro de poemas, que pasó a la estantería para acompañar  las novelas de Verne, Salgari o Dumas.

Aquellas novelas, que por otra parte tanto me gustaría volver a leer en algunos casos, se han ido perdiendo en sucesivas mudanzas, pero todavía conservo aquel volumen de poemas, ya con las hojas amarillentas; signo en un libro, curiosamente, no de decrepitud, sino de vitalidad. Es la tercera edición que hizo la editorial Losada de Buenos Aires (de la que tantos buenos libros de poesía o novela llegaron en aquellos años oscuros a España) en 1957, y mi prima lo había comprando, según consta en un sello de tinta azul, en la librería y papelería Hermanos Sanz, que estaba, y ya no está, en la calle Princesa de Madrid y que tenía sucursal en Caracas.

AGUA

“Hay países que yo recuerdo
como recuerdo mis infancias.
Son países de mar o río,                                            
de pastales, de vegas y aguas.
Aldea mía sobre el Ródano,
rendida en río y en cigarras;
Antilla en palmas verdi-negras
que a medio mar está y me llama;
¡roca ligure de Portofino:
Mar italiana, mar italiana!...”

Tenía razón mi prima. Entonces no entendí (no podía entenderlo, no había vivido lo suficiente) la sencilla profundidad de los versos de Gabriela Mistral, su capacidad para llegar a lo más hondo de la tierra y de sus gentes con palabras sencillas que componen imágenes conmovedoras de sorprendente serenidad:

LA COPA

“Yo he llevado una copa
de una isla a otra isla sin despertar el agua.
Si la vertía, una sed traicionaba;
por una gota, el don era caduco;
perdida toda, el dueño lloraría...”

O expresa con singular sencillez, sin alharacas, la dualidad que presidía su vida, y en general la del resto de los humanos (Que tanto recuerda la posterior “Gracias a la Vida” de Violeta Parra, quien siempre mostró un gran respeto y admiración por la poeta y a la que dedicó en su muerte los conmovedores versos a lo divino con que se cierran estas líneas: “Hoy día se llora en chile/ por una causa penosa./ Dios ha llamado a la diosa/ a su mansión tan sublime…”)

RIQUEZA

Tengo la dicha fiel
Y la dicha perdida:
La una como rosa
La otra como espina.
De lo que me robaron
No fui desposeída:
Tengo la dicha fiel
Y la dicha perdida,
Y estoy rica de púrpura
Y de melancolía.

¡Ay!, que amada es la rosa
Y que amante la espina!
Como el doble contorno
de las frutas mellizas,
tengo la dicha fiel
y la dicha perdida…

De verdadero nombre Lucila Godoy Alcayaga, y de formación autodidacta, Gabriela Mistral acabó haciéndose maestra, profesión que inició dando clases en escuelas rurales y acabó como asesora de las Naciones Unidas. Nació en 1889 y falleció en 1957. Obtuvo el premio Nobel en 1945, la primera vez que se otorgaba a una autora o autor latinoamericano. Su obra abrió las puertas de la poesía chilena a la modernidad lírica, e influyó directamente en la generación posterior, la que encabezaban los dos Pablos (de Roka y Neruda), un Vicente (Huidobro) y un Nicanor (Parra), así como sobre la hermana menor de este último, Violeta,. Entre otras muchas cosas fue cónsul de su país en España, y nunca olvidó sus orígenes vascos.

Tala”, publicado originalmente en 1938, como ya he dicho, está dedicado a los niños españoles que sufrían la guerra civil y el exilio. En una nota preliminar de la primera edición, reproducida como epílogo en la que me regaló mi prima, escribió la poeta: “…ahora entrego “Tala” por no tener otra cosa que dar a los niños españoles dispersados a los cuatro vientos. Tomen ellos el pobre libro de mano de su Gabriela, que es una mestiza de vasco, y se lave “Tala” de su miseria esencial por este ademán de servir, de ser únicamente el criado de mi amor hacia la sangre inocente de España, que va y viene por la Península y por Europa entera…”

Tenía razón mi prima Pilar. El tiempo es sabio y nos hace entender lo que de niños nos resulta incomprensible.

AUSENCIA

“Se va de ti mi cuerpo gota a gota.
Se va mi cara en un óleo sordo;
se van mis manos en azogue suelto;
se van mis pies en dos tiempos de polvo
…”